sábado, 21 de noviembre de 2009

nota de sociedad

Noche de relajo en el Kambak, inauguración del bar restaurante de Henri con la Puerta en peso allí dentro y calor de mujeres bellas y sabias y con buena savia por los cuatro costados, todas bellas, preciosas y con voces cantarinas... Sí, aunque faltó el oyente Marcelino, allí estaba La Puerta en peso, Anghel mirando a ver si llegaba Campanilla, que no llegó, qué pena... Sí fueron mi hermana y mi cuñado, e intenté que Juan Royo, con su poder de convicción, le quitara a mi cuñado la matraquilla de reconstruir castillos, pero resulta que Juan estaba a favor de la reconstrucción... así que salté a la oyente argentina que in illo tempore se escandalizó con un poema de Panero... y un actor cubano... y Lorenzo... a ver si pone las fotos en su página y me acuerdo de más cosas... y luego subimos al Parra, zona de José María, con su mujer, su hermano y Ramón y Nicolás Estévanez... Lástima que me tuviera que ir, porque hoy toca campiña en La Orotava... También vi, en el Kambak, a Zenaido, y hablamos un momento de Roberto, que está preparado una gran comida... Roberto es un gran cocinero, lástima que... en fin, luce un sol espléndido de otoño...

1 comentario:

  1. Campanilla caprichosa
    no pasó por el Kambak
    más cenó como una diosa
    en otro hermoso lugar

    La familia la exigía
    la cena, ya reservada
    como elegir no podía
    pues a cenar encantada

    Con un buen vino crianza
    y buena carne en la mesa
    se fue llenando la panza
    aunque luego todo pesa...

    Les explico lo de anoche
    para que lo sepan todos
    y nadie me lo preproche
    pues no pude hallar otro modo.

    Jesús quedó embelesado
    con tanta preciosidad
    y por los cuatro costados
    savia había a rebosar

    y con tanto bellezón
    de voces tan cantarinas
    se llevó un gran alegrón
    pues todas eran divinas

    Dejemos clara una cosa
    pues con tanta maravilla
    de mujeres tan hermosas
    nadie extrañó a Campanilla.

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