--Tus amigos fascistas te tienen embrujado --me dijo el hombre, mi amigo envidiado, por su juventud, éxito y mecánica monedada. Un artista como él sabe que la palabra "fascista" se ha vuelto comodín del verbo, ya no tiene el poder significativo de antaño, cuando Musolini enchironó a los más altos mafiosos y camorristas y, como cuenta Pérez Triana, los norteamericanos liberaron a los mafiosos como prisioneros de guerra y gracias a ellos tenemos nosotros Alcapone. "Facista" (o facha). como decía Nuestro Amado Líder, es lo contrario de "progre". El niñato progre llama fascita a quien no le baila el agua. Supongo que el fascista hará lo mismo. El que no se meta en rituales esotéricos es un puto progre de mierda. El pueblo y el populacho es inminentemente fascista, le agrada los gremios medievales, las brujas del medievo en el aquelarre y los romances de amor y muerte. Escritores del pueblo. Anónimos hasta que llegaron los señores y dijeron esto lo hago mío: Juan de Mena, Arcipreste de Hita, Guillermo de Aquitania... , autores con más peso que Celine, Bukosvki y Javier Hernández, nuestro novelista negro con procedimiento policial e ícono perdido; ayer en La identidad fragmentada (hoy en casa de Chani)la icono perdida era la Virgen de Candelaria, hoy con el manto lleno de hormigas sobre la arena. Y mañana, el perdido icono en la obra de Javier será el Señor de las Tribulaciones, el que está en una iglesia de Santa Cruz, creo que la de la antigua calle de San José. "El sueño de Goslar", apunte ese nombre germano, como germano será el rey de La Laguna el próximo viernes 29: Wagner, dirigido por nuestro Víctor Roncero, a las 18.30 en La Universidad. Y luego la G-21 en el Ateneo de La Laguna. Auguramos noche brillante en Cota 600.
Ayer con Marcelino hablamos de mujeres. Enamorados crueles. Y recordé una cita del libro de Federico Niche, el Zaratustra, que me prestó Chani para que leyera en la radio: No leí nada porque la cita marcada se me había perdido: decía que el guerrero sólo se mueve por el peligro y el juego, y que ama a las mujeres porque son el juguete más peligroso, hasta la más modosita lo deja siempre con un sabor amargo. Como trabajo ahora una basurita sobre gigolós, todo lo que se diga sobre las mujeres es poco. Ataques y defensas medievales abundan como tantos torneos de palacio, hasta que un judío reunió todo el magma y escribió una cosa que se llamó La Celestina, obra que yo sepa nunca representada en su totalidad, siempre martirizada y mutilada, esa puta vieja.
En la misma página, Zara Tustra añadía que el hombre debe dedicarse a la guerra, y la mujer a ser reposo del guerrero, todo lo demás es Locura. Puede que la figura del Gigoló sea solar, aúna en única zona guerra y reposo. Hoy me lo decía Pepe, el autor de La Magua, el éxito hoy sólo lo tienen los gigolós y los homosexuales. Pepe lo decía en itialiano, en el italiano de Dante y Caruso. Y sea verdad o no, la cita es preciosa para abrir esa obrita, si la termino ya de una santa vez y la encomiendo a mi agente. Que la haga circular por el hormigueo de lectores que se comen mi obra.
Hoy desencanto, leyendo la columna de Andrés Chávez en El Día. Gandy, a quien yo tenía en un rincón de mi altar de ídolos, fue un bujarrón vulgar. Como para darle la razón al antiguo amigo italiano de José Rivero Vivas. Yo un ron y él un té con limón en el Monterrey, la mar serena y la luna llenando. Sirvió Carmita.
Lapsus memoriae. No es "El sueño de Goslar" --novela que aún no sabemos los lectores de Javier Hernández cuándo tendremos en estampa-- sino "El fondo de los charcos", con el poeta Domingo López Torres en una época pasada, y el Señor de la Tribulaciones en el tiempo presente, como fuentes de la trama de esa novela que pronto, si hay suerte y salud, tendremos en forma de libro.
ResponderEliminarÚltimamente estás pletórico, hasta en los lapsus y otras incorrecciones. El 29 como horizonte estelar y la luna en creciente.
ResponderEliminarYa me hubiera gustado escuchar a los enamorados crueles hablar de mujeres, jaja.
ResponderEliminarEn fin, pensaba en lo obsoleto del reposo del guerrero, al que hoy en día, las más fervientes feministas lo denominarían al revés, el reposo de la guerrera; pero aún así, siempre hay una Sigrid, en un reyno que no es el de Thule, que espera que el Capitán Trueno termine de guerrear esa guerra cada vez más mezquina y cambie de rumbo su bajel para disfrutar del descanso.
Por cierto, si necesitas saber cosas de mujeres para tu librito, creo que bien cerquita de ti tienes a un personaje que no tiene desperdicio, únelo a los cuentos de Beba and company, migo, y tienes todos los componentes necesarios, aunque seguramente te saldría con tintes de culebrón, jaja.
Besos y abrazos para todos desde mi REYNO.