domingo, 10 de julio de 2011

asuntos colindantes

Ya tengo el primer amigote en el barrio de La Maldad. Angel Tomás. Lo conocí hace tiempo. Me vendió un bastidor por dos euros. Lo único que he hecho con ese bastidor es tenerlo de perchero, por lo pronto. Puede, cuando me libere de la sensación de estar viviendo el fin del mundo, que lo use como debe ser, no con modelos estilo Balthus, por supuesto. Módelos hechas y derechas. Ya veremos.
--¿Sigues pintando? --pregunta Anghel Tomás mientras subimos por el lateral del Campo de Futbol, en la banda que da al Gran Canal y sus montañas feroces. Dice que mañana se opera de un bulto que le abomba el cuello. A veces me pide un euro y otra veces me da una china de chocolate espeso. Equilibrada relación económica.
--Cuando quieras algo rico del barrio me avisas --dice, y nos despedimos. Él a la plaza del machango y yo al callejón del Tanque.
Algo rico lo de anoche. En la Cuesta Piedra. Un cuento que no sucede todos los días, por lo menos a mí. Aquí no lo puedo contar, traspasa los límites que me he impuesto en este blog. Si me sale el cuento, lo publicaré, Ramallo mediante, en el Zoo punto cero. Ya veremos.
Bueno, que me he olvidado de las clases de literatos del futuro. Hojeo los libros que me dio Deivi. El poeta en N.York, de Lorca. Bah, poesía envejecida. Obra completa de Antonio Machado. Este hermano de Manuel Machado sigue diciéndome algo, y no elucubraciones de Machango. También entre esos libros, la tía Julia de Vargas Llosa, una biografía de Zapata, Tiempo de silencio célebre in illo tempore, Requién por un campesino español de J. Sender, obra que leeré con más atención, etc. Tengo lectura para rato. A ver si me ilustro.
En cuanto al bar de la ignominia, petit antología para Lunula, buen material entre manos, salvo uno que a ver cómo convenzo al autor para que dé un giro a su cartón piedra, y aún falta lo de Marcelino y Anghel.
Con Anghel y sus pimpollos de G 21, el jueves próximo, y Ramón y José María, nos veremos en la librería del Cabildo, junto al antiguo cine Baudet en S/C.

1 comentario:

  1. Tachar de poesía envejecida a Poeta en nueva york, es, cuando menos, un poco precipitado. Dele usted una oportunidad.

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