sábado, 18 de enero de 2025

santería 4

 

Picoteo en una plática que hizo, desde Miami, un tal David, y hablador algo histriónico que despotrica contra la santería cubana, la verdad la tiene él, y a veces su mujer se le acerca y aclara con propiedad lo que su marido pretende enseñar:    

Aggayú Shola el misterioso. Dicen que es el dios del volcán y del desiertos. Habla del sincretismo con San Crístobal de la Habana, que no era ni santo ni de Habana. El santo se llamaba Oferu, o algo así, y lo rebautizaron Cristobal; transportaba a las personas de un lado al otro de un río. Habla de la historia de un niño y un bastón. Dice que Cristobal es patrón de los viajeros. Un emperador lo mandó decapitar. Aggayú se sincretiza también con san José y con San Miguel Arcángel. Dice que el verdadero Aggayu no tiene nada que ver con esos personajes. Va más allá. Es un dios que permite a los humanos atravesar la grandes dificultades, intelectuales y emocionales. Es el dueño de las termitas. Habita en la cumbre de las termitas. Es padre de Orungán, que significa el Sol del mediodía. Aggayú es el barquero por excelencia. Tema polémico: los investigadores cuentan que su primera hija llegó a Cuba como esclava. Dice que Obatalá, al padre de este dios, fue el primero en usar la tela blanca en el cielo y Aggatayú lo fue en la Tierra. Está asociado con el amanecer del día. Es el momento de tocarle maracas. Es decir, está asociado con el sol naciente. En Nigeria lo relacionancon el hipopótamo. Un escritor dice que es tan fuerte como el elefante dd agua, el qué mas deja huella de su paso sobre la tierra. Fue condenado a llevar sobre sus hombros la tierra y los cielos. Su madre es la temible Ouriña (?), la lava que se solidifica. Aggayú ayuda a su madre a mantener el poder que ella tiene. Ouriña vive bajo las aguas del mar. En Oyó, donde fue un rey, se dice que es el que lleva las alma de la materia al espíritu. De la tierra al cielo. Supera este rey ermitaño los grandes obstáculo. La oscuridad alimenta más que la luz.

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Interesante el directo de David, pero son cuatro horas de darle a la lengua y yo lo dejo cuando ha llegado a los cuarenta minutos. Tinglado complicado la cosmología Yoruba. Habría que tener un veraz erudición si se quiere entrar en detalles. Mucho camino para un cojo estropeado. Creo que voy a volver a las lecciones espectaculares de Maestro, el que dice que la metafísica de Kant llevó a Alemania al desastre y que Shakespeare no le llega a Cervantes ni a los tobillos.

  

lunes, 13 de enero de 2025

santería 3

 Uno de los santos que en Cuba sincretizaron con Oggún, es San Juan Bautista, muy relacionado con las historias que cuenta Nguyen. Oggún es el orisha de las guerras, la tecnología, de los herreros, de los cirujanos... y posee un carácter irascible y violento contra sus enemigos. Su símbolo principal es el machete (embelebobo), con el que abre los caminos en la selva. Es el abridor de caminos. En esto de los caminos está relacionado con Elegguá. Tiene varios amores, y el más reconocido es con Oyá, la diosa que lo traicionó, yéndose con Changó, porque Oggún, enfrascado en sus trabajos, no la atendía. Su saludo es "¡Oké Oggún! ¡Oké Oggún Kobú Kobú Aguanilé!. Su número es el 3 (otros dicen que el 7) y su día el martes. Sus colores, el morado o el verde negro, y su día el 23 de abril. Es hijo de Obatalá y Yemayá y hermano de Changó, entre otros. Forma una trilogía con sus hermanos Elegguá y Ochosi. Sus hijos espirituales tienen variadas relaciones con las mujeres, van de flor en flor. Me interesa especialmente, como reflejo de Vertical blues, que violó a Yemayá, su madre. En el caso de este dios hubo propio arrepentimiento, antes de que Obatalá lo condenara, y su penitencia fue abandonar el mundo y esconderse en el monte. Mala cosa para el mundo que se fuera de él quien abría los caminos. Otra cosa que me interesa, es la relación con Oyá, quien lo abandona y se va con Changó. Recuerdo la historia de que, enfurecido, Oggún andaba buscando a los nuevos amantes. El dios de la danza y la belleza masculina, Changó, para ocultarse se introduce con Oyá en el fondo de un río. Ella, por falta de aire, se está asfixiando y el dios del rayo la besa y llena de aire sus pulmones.

El doctor Luciano Pulido, experto en salud holística y babalawo (sacerdote de la religión yoruba), hace un análisis espectacular de Oggún. Me fío más de este hombre que de wikipendia, de donde saqué algunos datos en el párrafo anterior. Don Luciano, explicando la acción y la función de Oggún en el cuerpo humano, dice que sin él la vida no es posible. Para él el número del dios es el 7, el único número que no entra en el teorema llamado godeliano. Cuenta cuando una diosa amante le unta la boca con miel. Y cuenta cuando Obatalá (el cerebro) quiso prescindir de Oggún y cuando vio las consecuencias, lo volvió a llamar. Dice que es el descubridor del fuego. Dice que su actividad lleva el oxígeno (Yemayá) a todas partes del cuerpo. Etc. 

domingo, 12 de enero de 2025

santería 2

 Sigo con la curiosidad puesta en las creencias yorubas. Los esclavos cubanos y brasileños disfrazaron con la santería o el candoblé esas creencias. Así disfrazaron a Changó con Santa Bárbara o a Babalú con San Lorenzo. Yo ahora imagino otro sincretismo, con las antiguas creencias griegas. Imagino a Yemayá relacionada con Neptuno o a Ochum con Venus. Elecuá con Mercurio... En fin, erudita labor que no está a mi alcance.

Mientras tanto tomo notas al azar. Veo a Oyá bailando y Babalú, escondido tras una puerta, enfermo, mirándola por el ojo de la cerradura. Oggún, el que abre los caminos, le pregunta a Babalú por qué no sale a bailar,, y lo llena de paja y palma seca y lo empuja a bailar con Oyá. Sopló un ventarrón y la paja y las palmas volaron y lo dejaron desnudo. Oyá así lo vio, enllagado de pústulas, y lo invitó a bailar con ella y le dio la noche de su vida.

Otra historia dice que Yemayá vivía con sus hermanas (Oyá y Ochum) y les enseña el arte de la pesca. Sucede que un rey se enamora de Ochún, pero lo que logra es raptar a Oyá, su hermana. La coge de rehén y pide un rescate. Mientras Yemayá se pone frenética, Ochum reúne moneditas de cobre y va al palacio de rey a pactar el rescate. --No me interesa el dinero sino tu virginidad --le dijo el rey. Y así Ochún  entregó su inocencia para rescatar a su hermana.