sábado, 23 de mayo de 2020

La brujería la practicaban, según una antropóloga, los prostíbulos de Galicia, unas para atraer clientes limpios, con dinero y no latosos. Otras, para perjudicar a una competidora, y me imagino que habría también brujería curandera, que eliminara las deficiencias, las desganas, etc. La brujería es efectiva porque fijar la mente en algo es volverte un imán o un dardo envenenado. Es más peligroso querer hacer el mal a alguien con el pensamiento que cuando se lleva a la práctica de un modo físico. Un golpe sabes lo que te duele y se cura. Un mal pensamiento de alguien sobre ti, que no sabes de dónde viene ni lo que te está haciendo, es más mortífero.

--Si no nos deseáramos el mal unos a otros, viviríamos eternamente --dicen unos negros esclavos en la novela sobre Aguirre, creo que de J Sénder.

Puede ser. Desear el bien ajeno también tiene sus efectos.

El logro es desear el bien de los que te desean el mal. No por santidad sino por egoísmo. Si lo logramos, si sinceramente lo logramos, el mal que el otro nos desea se le vuelve un tiro por la culata.

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