domingo, 10 de abril de 2022

madejas mentales y noticias menores

 Uno nombra esto o lo otro, pero lo que se sabe de esto o lo otro es mínimo, y lo que uno sabe, más mínimo aún. Para conocer esto o lo otro hay que sentirlo, vivir dentro de lo que se quiere conocer. Pero lo mínimo no es despreciable. Se aprende a leer palabras conociendo primero las letras, el sonido que tienen y cómo se relacionan unas con otras. Cada letra es un mundo, pero los prófanos nos conformamos con que nos sean útiles para lo que queremos, saber pronunciarlas y saber relacionarlas. 

Tonterías. A veces le da a uno por pensar tonterías por si llevan a algo imprevisto, pero pocas veces ocurre. Quizá por falta de insistencia. Manejar lo mejor que se pueda las tres herramientas del conocimiento, la sensorial, la sentimental y la intelectual. Por lo sensorial, descubres que las vocales no tienen punto de articulación sino más o menos abertura de los labios. De la A, la más abierta, se puede decir que lo abarca todo. Y la U lo cierra todo. Lo abierto es claro y lo cerrado es oscuro. La A te invita a saltar al exterior y la U a recogerte dentro. La A te lleva a generosidad y la U a la usura. Creo que voy a mirar el poema que sobre las vocales escribió Rimbaud, publicado en año de la Cabra y en un día marcado por el arcano de El Emperador.

En el poema la A es negra y zumba en torno a atroces pestilencias, y la U son ciclos, vibraciones divinas, verdes mares, paz de pasto sembrados de animales, de surcos que la alquimia ha grabado en las frentes que estudian. 

Nada que ver (casi lo contrario) con lo que yo dije. En fin, sigo metiéndome en camisas de once varas. No tengo cura. Pero sigo tirando barro a la pared. Pienso en las palabras que comparten la U y la A como únicas vocales. Cura. Pura. Dura. Muda. Dejo estas cuatro como muestras. Cada una comparte varios campos  semánticos distintos, ajenos entre sí. ¿Y qué? Pues no sé.  

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Sole lee La gesta de Juan. Está embebida y ya ella también enamorada de la bestia que surgió del mar. 

Hoy sale la entrevista de Estela a Belén en El Persegudor (Diario de Avisos). 


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